Historia del gato Burmilla
La historia del Burmilla comienza en 1981 en el Reino Unido, cuando la señora Miranda Bickford-Smith decide comprar un gato persa chichilla como regalo para su esposo al cual le pusieron por nombre Jemari Sanquist pero para esto ellos ya tenían una gata Burmés de color lila la cual se llamaba Bambino Fabergé.
Cuando Fabergé entro en celo sus amos decidieron separarla de Sanquist pero accidentalmente se dejó una puerta abierta donde los gatos aprovecharon para aparearse, luego el 11 de setiembre de 1981 la gata dio a luz a cuatro crías las cuales todas resultaron ser hembras y tenían un pelaje de color plata sombreado, bastante tupido y pegado al cuerpo.
Rápidamente esto llamó la atención de una amiga de la familia llamada Thérèse Clarke quien vio que esos gatos podrán convertirse en una raza totalmente nueva, especialmente dos de las gatits llamaron su atención las cuales fueron llamadas Galatea y Gemma, luego de eso Miranda Bickford-Smith y Thérèse Clarke decidieron llevar a cabo lo que tenían en mente.
Posteriormente se siguió utilizando al persa chinchilla cruzándolo con una de las gatas hasta que en la siguiente camada se consiguió un solo gato macho llamado Jacynth al cual se cruzó con la gata llamada Gemma y se convirtieron en los fundadores de la línea Kartush la cual fue fundada por Thérèse.
Despues de esto se tenía que elegir un nombre para la nueva raza así que Miranda propuso ponerles Burmilla ya que si se unían las palabras Burmes y chinchilla saldría ese nombre, quedando las dos personas de acuerdo.
En 1983 Miranda y Thérèse acordaron que cada una iba a desarrollar la raza de acuerdo a los criterios de cada una, luego Miranda logró que se escribiera el estándar de la raza y fuera aceptado por la GCCF y el 21 de enero de 1984 se fundó el club del gato Burmilla siendo co-fundadora Thérèse Clarke.
Luego de eso dos gatos Burmilla fueron llevados a Dinamarca donde la señora Birgit Behammer se encargó de promover esta nueva raza, en 1985 se fundó la sociedad de gatos del grupo asiático y posteriormente en 1994 la FIFe reconoce a los Burmilla y se crea los estándares de la raza.
En 1995 la GCCF reconoce el Burmilla y entre el año 2003 y el 2008 se lleva esta raza hasta Australia donde se forma la Asociación de Criadores de Burmilla y comienza la crianza de esta raza, donde son bastante aceptados, hasta la fecha la TICA los mantiene en la categoría de nuevas razas avanzadas.
Carácter del gato Burmilla
Este gato es inteligente, cariñoso y bastante activa, sentirá una gran curiosidad por todo lo nuevo y se la pasara saltando de un lado a otro, no tendrá reparos en trepar donde se les antoje, demostrar también su temperamento cuando algo no le agrade.
Siempre querrá estar al lado de sus personas favoritas y no dudará en echarse cerca de sus amos, por otro lado se llevara bien con otros animales y no perderá la oportunidad de jugar con ellos siempre que se pueda. Por más que pasen los años y el gato se vuelva mayor no perderá por eso su espíritu alegre y juguetón.
